martes, 7 de julio de 2015

DESCIENDO LA MONTAÑA



DESCIENDO LA MONTAÑA


Aún recuerdo la cima
pero ya no la anhelo
otros son los sentidos que me ocupan
en tantas dimensiones y legados.


Acepto lo que la marcha impuso
- no siempre he sido yo, quien eligiera -
y muchas veces incliné la cabeza
esperando pasaran las borrascas
el descenso apacigua finales.


A cada paso me enraízo en lo profundo
repaso cada surco de recuerdos
doy el justo lugar a lo vivido
mientras sigo la senda que desciende
y una remota savia va surcando mis venas.